Origen y significado de Ena

Significado del nombre Ena

¿Qué significa el nombre Ena?

Ena es un nombre predominantemente femenino de origen Irlandés.

Ena es un nombre propio de origen irlandés cuyo significado etimológico podría derivar como hipocorístico del femenino “Aithna”, así entonces Ena se interpreta como ‘fuego pequeño’.
Una de las portantes más destacadas y recordadas con este nombre es quizá Victoria Eugenia de Battenberg, también conocida como Ena de Battenberg, nacida en España en el año 1887, principalmente recordada por haber sido la esposa del rey Alfonso XIII y madre de Juan de Borbón.
Es importante recalcar que aunque este apelativo es principalmente registrado como un nombre de uso femenino, no es inusual encontrar registros de éste en personas de género masculino.
Cabe mencionar que este nombre también es el apelativo con que se conoce una localidad ubicada en Aragón-España.

Personalidad de Ena

Trabajadora y seria, Ena suele ser perseverante, paciente y decidida a la hora que luchar por sus ideales. Poco a poco se va labrando su destino, el cual esta basado en la seguridad de las personas cercanas así como de las cosas materiales para sentirse plena, aunque esto para muchos sea señal de materialismo. En lo sentimental es una mujer fiel, sensible y simpática, la cual prefiere tener pocos amigos, pero que sean de toda su confianza.

Onomástica Ena

La fecha de celebración del Santo de Ena es 1 de Noviembre.

Ena en otros idiomas

  • Ena en Griego:

    Ένας

  • Ena en Hebreo:

    אנה

  • Ena en Coreano:

    에나

  • Ena en Árabe:

    إينا


Análisis por numerología del nombre Ena

Naturaleza Emotiva:

Naturaleza emotiva y clarividente. Se expresa por medio de la perseverancia, la concentración, la suficiencia y la clemencia. Ama lo oculto, lo que es y puede ser. Le gusta sentirse admirado.

Naturaleza Expresiva:

Es exigente. Se expresa en forma original en la intimidad y en la integridad. Se distingue por su delicadeza. Ama el buen criterio y el misterio. Busca la aprobación.

Talento Natural:

Es mente de pensamiento impaciente. Se expresa como pensador receptivo, sensitivo y observador en actividades que requieren de la versatilidad, la novedad y la curiosidad. Recibe aumento en los campos de acción que tocan al sentimiento, al deseo de vivir y al de inquirir en todos los campos, más bien como mente directora que como mano ejecutora. Ama el amor, no por lo que da, sino por lo que es.
Podría destacar en profesiones como vendedor, psicólogo, investigador, escritor, detective, viajante, corredor de bolsa o de seguros y cualquier profesión que implique manejo de dinero.


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Diccionario Alfabético de Nombres