Chistes Religiosos

Chistes religiosos

Un Jefe de Estado en el Cielo
Siempre cuando un Jefe de Estado llega al Cielo, Dios se pone de pie para darle la bienvenida.
Tan sólo cuando llegó Franco no se levantó San Pedro se acercó y le dijo:
— Padre Eterno, ¡Es él Generalísimo de España! ¿Por qué no se levanta como hace con todos los demás Reyes y Jefes de Estado?
— Jamás con éste.... Si me levanto, seguro que se sentará en mi trono para siempre!
Enviado por: Anónimo, hace más de un año, desde Planeta Tierra
Déjenlo Pasar
Un Papa muere y San Pedro no le quiere permitir la entrada en el cielo. El papa, furioso, pide hablar con Dios.
Pero Dios tampoco sabe quién es el Papa. De repente, se da un golpe en la frente.
— ¿Cómo has dicho, Pedro? ¡Ahora recuerdo el pequeño negocio que montamos en Roma!
¿Todavía sigue funcionando por allá! ¡Buen, Pedro, déjalo pasar, pero antes cierra bien la caja fuerte!
Enviado por: Anónimo, hace más de un año, desde Planeta Tierra
Cuando no te Sabes la Oración
Un hombre al parecer tonto y, desde luego, corro de memoria, además de muy perezoso, teniendo miedo de equivocarse al rezar el Padrenuestro, que nunca había podido aprender completo, decía siempre en lugar de las oraciones de la noche todas las letras del alfabeto, terminado de este modo:
— Dios mío, con estas letras se componen todas las oraciones del mundo. Recibidlas todas, Señor, y haced con ellas la oración que más os plazca. Amén.
Enviado por: Anónimo, hace más de un año, desde Planeta Tierra
Un Pecador Inteligente
Uno que se confesó había cometido tantos pecados que el cura le puso, como penitencia, ir desde su casa a la ermita con los pues descalzos.
— ¡Otra, señor cura, que se me van a quedar los pies destrozados! - protestó el hombre -. ¡Con esos caminos tan malos que hay!
— Bueno, pues vas calzado, pero dentro de los zapatos pones unas cuantas piedras.
— Bueno, pues garbanzos.
El penitente se fue, muy contento, a cumplir la penitencia. Sólo que, antes de ponerlos dentro de sus zapatos, cocinó los garbanzos.
Enviado por: Anónimo, hace más de un año, desde Planeta Tierra
No Funcionó
Un cura se enfadó finalmente con el hecho de que los gorriones entrasen en su granero y le comieran el trigo,
Y decidió poner un espantapájaros. Para ello, utilizó una escoba, unos palos que cruzó con la escoba,
Y al conjunto le puso una vieja levita que encontró en un arcón.
Cuando, al cabo de una semana, volvió a mirar los resultados, pudo comprobar que los gorriones....
No sólo seguían acudiendo a comer al granero, sino que algunos de ellos habían hecho su nido en los bolsillos de la levita.
Enviado por: Anónimo, hace más de un año, desde Planeta Tierra
El Padre Adivino
— ¡Mi mujer ha parido! - apareció corriendo en la plaza un vecino del pueblo -
¡Mi mujer ha parido!
— Hombre, me alegra - dijo el cura, que pasaba por allí - ¿Ha sido niño ¡- No, señor.
— Ah, ha sido una niña.
— ¡Diantre! ¿Cómo ha podido usted adivinarlo?
Enviado por: Anónimo, hace más de un año, desde Planeta Tierra
El Borrachín del Pueblo
Un célebre orador estaba predicando en tiempos de Cuaresma sobre el tema de la templanza,
recordando a sus oyentes que comer y beber no eran placeres de reino de los cielos.
— Hombre, ya - dijo el borrachín del pueblo -, pero al menos podrían poner allí una botella, por si alguien tuviera, sed, ¿No?
Enviado por: Anónimo, hace más de un año, desde Planeta Tierra
Problemas Religiosos
A un niño que ha sido suspendido de un examen de doctrina cristiana, le preguntó su padre:
— ¿Por qué estás tan triste, qué te ocurre?
— ¡Me ocurre que el maestro siempre me está llamando tonto y torpe!
— ¿No será porque lo eres?
— ¡Qué he de ser! ¡Lo que pasa es que nunca le gustan mis respuestas a sus preguntas! Hoy mismo me ha preguntado cuántos dioses hay.....
— Y tú le habrás dicho que uno solo.
— ¡Nada más habría faltado eso! ¡Con lo que se ha enfadado porque le he dicho que hay tres, no veas si le llego a decir que solo hay uno.......!
Enviado por: Anónimo, hace más de un año, desde Planeta Tierra
La Historia Sagrada
Queriendo un buen padre hacer ver al cura de su pueblo que su hijo Federico sabía perfectamente la historia sagrada,
Le hizo en su presencia la siguiente pregunta:
— A ver, hijo mío, ¿Quién hizo el cielo, y la tierra?
— ¡Yo que sé de eso, padre!
— ¡Cómo que no lo sabes, miserable!
— Está bien, he sido yo, pero no te enfades, que no lo volveré a hacer.
Creyendo el cura que podía aliviar un poco la tensa situación, hizo por su cuenta una pregunta:
— Pero estoy seguro que sí sabes cómo murió Nuestro Señor Jesucristo.
— Pues no.... ¡Pero sí sé que estaba muy enfermo!
Enviado por: Anónimo, hace más de un año, desde Planeta Tierra
Diferencia Entre un Judío y una Pizza
¿En qué se diferencian una pizza y un judío?
— En que la pizza no grita cuando la meten en el horno.
Enviado por: Ordix138, hace más de un año, desde Venezuela
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