Chistes Calientes

Gloria Trevi: ¿Por qué Gloria Trevi no usa calzones?
— Por que le gusta traer el pelo suelto.; Enviado por: Maria Marquez, hace más de un año, desde California
Sеxо: El hijo le dice al padre:
— Papá, papá, ya tuve mi primera relación sexual.
El papá le responde:
— A ver hijo, siéntate y cuéntame todo.
Y el hijo le responde:
— No puedo, es que me duele mucho. ? ? ? ? ? ?; Enviado por: Alejandro, hace más de un año, desde Guayaquil Ecuador
Principe Azul: Se dice que el príncipe azul estaba buscando esposa, pero el requisito principal era que fuese inocente y en eso se encuentra con blanca nieves y le pregunta:
— Hola, ¿Te quieres casar conmigo?
A lo que blanca nieves le responde:
— Claro que si
El príncipe luego le muestra su miembro y le pregunta ¿Tu sabes lo que es esto?
— Es una pichula, responde Blanca Nieves
El príncipe responde:
— No gracias, yo necesito una esposa que sea inocente.
Sigue caminando el príncipe y al poco rato se encuentra con la Cenicienta y le pregunta:
— Hola, ¿Te quieres casar conmigo
A lo que la Cenicienta le responde:
— Claro que si
El príncipe luego le muestra su miembro y le pregunta ¿Tu sabes lo que es esto?
— Es una pichula responde la Cenicienta
El príncipe responde:
— No gracias, yo necesito una esposa que sea inocente.
Sigue caminando el príncipe y luego se topa con la caperucita roja y le pregunta:
— Hola, ¿Te quieres casar conmigo
A lo que la Caperucita Roja le responde:
— Claro que si
El príncipe luego le muestra su miembro y le pregunta ¿Tu sabes lo que es esto?
— Es un honguito
El príncipe contento por haber encontrado a una mujer inocente se casa con ella.
En la noche de bodas le vuelve a mostrar su miembro y le vuelve a preguntar:
— ¿Sabes que es esto
Caperucita responde:
— Es un honguito
— Príncipe: no, es una pichula
— Caperucita: no, es un honguito
— Príncipe: no, es una pichula
— Caperucita: no, es un honguito, pichula es la que tiene el lobo.; Enviado por: Renzo Farfan, hace más de un año, desde Perú
Dos Monjas: A dos monjas las están violando, una dice:
— ¡Hay Dios, perdónalos que no saben lo que hacen!
La otra monja le dice:
— ¡Será el tuyo por que el mío si que sabe!; Enviado por: Daniel Carrion, hace más de un año, desde Loja Ecuador
El Pecado la Abuela: Una abuela que va a confesar un pecado y va al cura y dice:
— Padre, quiero confesar un pecado.
— Dime hija mía.
— Quiero confesar que he sido violada.
— Pero si tienes 80 años.
— Ya, pero es que me gusta recordarlo.; Enviado por: Xaaaaaaalva, hace más de un año, desde Gav Barcelona
La Cura: — Verá doctor, tengo un problema. Cuando hago el amor con mi mujer, me da la impresión de que no siente nada. Algunas veces incluso se duerme.
— Eso tiene una explicación científica. Algunas mujeres en estado de excitación se acaloran tanto que les es imposible sentir nada. Trate de hacer el amor y abanicarle al mismo tiempo.
— Gracias doctor. Y esa noche así lo hizo. Pero cuando atendía al abanico no atendía a lo otro. Así que contrató a un negro para que abanicase a su señora.
— Venga negro abanica!
— ¿Sientes ahora Maruja?
— No, nada.
— ¡Mas fuerte negro!, ¿Y ahora, Maruja?
— ¡Nada, nada!
— Negro, trae el abanico y ponte tú.
El negro se sitúa encima de Maruja y el marido abanicaba.
— Y ahora Maruja, ¿Sientes?
— ¡Siiiií, siiií, ahora sí!
— ¿Ves? negro de mierda, ¡No sabes ni abanicar!
? ? ?; Enviado por: Carime Tascon, hace más de un año, desde Desde la Italia
Pepito: El papá de Pepito estaba desesperado por que no llegaba pronto del jardín de infantes, cabe recalcar que Pepito tenía 5 años; el papá buscaba por todos lados y no aparecía, cuando en eso llega Pepito hecho сulо de borracho y el papá le dice:
— Mijo, ¿Dónde estabas, qué te pasó?
Y Pepito le comienza a decir:
— Papi, papi, hablemos de hombre a hombre.
— ¿Qué te pasa?, le dice el papá.
— Papi, ¿Yo puedo tener hijos?
El papá le dice:
— Mijito, tú todavía no puedes tener hijos, ¿A qué viene esa pregunta?
Y Pepito dice:
— Ay, esa hija de ? me hizo vender el triciclo con el cuento del aborto.; Enviado por: Daniel c, hace más de un año, desde Ecuador
Condon: ¿Saben porque no existen los condones negros?
— Porque el negro adelgaza.
? ?; Enviado por: Evelyn, hace más de un año, desde Peru
Abuelito de Pepito: Había una vez estaba Pepito en el patio de su casa jugando con unas lombrices las cuales las sacaba de la tierra les ponía un líquido y las ponía duras y las colocaba en una cajita en eso lo ve desde lo lejos su abuelito el cual con curiosidad se le acerca a Pepito y le dice:
— Mira Pepito te doy $100 si me dices cómo le haces para hacer esas lombrices duras. Pepito le responde:
— Fácil abuelito, las saco de la tierra e inmediatamente les rocío con spray para el cabello y así se hacen duras.
El abuelito se retira. Al siguiente día nuevamente Pepito se encontraba en el patio de su casa haciendo lo mismo del día anterior en eso llega su abuelito y le dice:
— Pepito aquí tienes los $100.
A lo que Pepito le responde:
— Pero abuelito si los $100 ya me los diste ayer.
A lo que el abuelo responde:
— Bueno Pepito, estos $100 te los manda tu abuelita.; Enviado por: Alej Ndra, hace más de un año, desde México
Repostería: Había una vez una pareja de recién casados, el marido estaba en el sillón de la sala leyendo el periódico y le dice su esposa:
— Amor, ven por favor necesito que me ayudes a arreglar la llave que tiene una fuga de agua.
Y el marido le responde:
— Ubícate mi amor, ubícate. Yo soy Arquitecto y no un plomero.
Y la esposa desconsolada va hacia la cocina otra vez y en eso nuevamente el marido escucha la voz de su esposa diciendo:
— Mi amor, necesito que me ayudes a arreglar el cable de la energía eléctrica tiene algún corto circuito.
Responde el marido nuevamente:
— Ubícate mi amor, ubícate. Yo soy Arquitecto, no soy un electricista.
Total que le dice la esposa como 1000 detalles que tenía su casa y con la misma respuesta absurda del marido.
Al día siguiente el marido sale a trabajar y al regresar a su casa se da cuenta de que todo está en orden y sorprendido le pregunta a su esposa:
— Pero mi amor, ¿Cómo le hiciste para pagar a todos los que te hicieron el trabajo de la casa ya que sólo te deje lo necesario?
Y la mujer le responde:
— Pues fue muy sencillo, me dijeron cada uno de los trabajadores que se conformaban con una rebanada de pastel o hacer el amor con ellos.
A lo que el marido le dice:
— ¿Y qué fue lo que hiciste, les diste su rebanada de pastel?
A lo que la mujer responde:
— Ubícate mi amor, ubícate. Yo soy ama de casa, no pastelera.; Enviado por: Alejandra, hace más de un año, desde México

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